Arabia Saudí prohíbe el casamiento con cinco países

Las autoridades de Arabia Saudí prohibieron a sus súbditos a casarse con extranjeras de Chad, Bangladés, Pakistán, Marruecos y Birmania. Lo...

Las autoridades de Arabia Saudí prohibieron a sus súbditos a casarse con extranjeras de Chad, Bangladés, Pakistán, Marruecos y Birmania. Los varones deberán tener 25 años y las niñas más de doce.

(SoyArmenio / Nóvosti) Según el jefe de Policía de La Meca, general Assaf Qurashi, la decisión se tomó a causa de que el número de ciudadanas de estos países casadas con saudíes superó las 500.000.

Las normas establecen además nuevas condiciones a todo matrimonio con una extranjera. En particular, el novio debe ser mayor de 25 años y presentar una autorización del distrito donde vive y documentos que lo identifiquen.

Si el hombre ya tiene una mujer saudí debe confirmar la necesidad de casarse otra vez. Entre las posibles razones figura una enfermedad incurable de la primera esposa, su esterilidad o el divorcio a condición de que haya sido tramitado seis meses antes de la fecha de la eventual boda.

Últimamente en Arabia Saudí se incrementó el número de casamientos con extranjeros: muchos creen que estos matrimonios son más felices y duraderos. A la vez, crece la tasa de divorcios. Según el Ministerio saudí de Justicia en los últimos años su cantidad aumentó del 18% al 22%.

Sólo con niñas de 12 años en adelante

En este país, donde la fuente de la legislación es la Sharia, no están prohibidos los matrimonios de niñas, justificados por los guías religiosos como parte de la tradición saudí e islámica. La boda del profeta Mahoma con una niña de nueve años ha servido de argumento para los defensores de esta práctica.

Pero ya algunos críticos venían reclamando que se impusiese una edad mínima para estos matrimonios y, recientemente, el caso de la niña de 12 años ha sido el acicate para que comience a regularse.

El año pasado, la menor fue obligada por su padre a casarse con un primo, de 80 años, a cambio de 85.000 riales saudíes (16.300 euros). La menor, apoyada por su madre, solicitó el divorcio del anciano. Su progenitora, separada del padre de la menor, acusó al anciano de haber violado a su hija.