Diciendo adiós a la mitad de nuestro idioma. Por Garen Yegparian

Recordaré una triste situación en dos ocasiones en las últimas semanas. Pronto podremos presidir la muerte del armenio occidental, entregá...

Recordaré una triste situación en dos ocasiones en las últimas semanas. Pronto podremos presidir la muerte del armenio occidental, entregándole a Talaat Ataturk una nueva victoria asesina.

Hace unos tres años un amigo mencionó que había visto al armenio occidental en la lista de la ONU de las lenguas en peligro de extinción. Más recientemente, otro amigo por correo electrónico me envió un enlace a un sitio que demostraba cómo decrecía el uso del armenio occidental.Entonces, tuve una conversación con uno de los más versados ​​"jóvenes" (40 y algo) en la lengua. Este amigo comentó que con facilidad el armenio occidental caía cada vez en desudo por falta de uso. Esto no era solamente una referencia a otros, sino a una situación en su propia vida personal.

Pero el factor decisivo, que realmente duele, fue el comentario de un buen amigo de mis padres... mi fuente de nuevas palabras (para mí). Fueron realmente escalofriantes: "No pierdas tiempo tratando de salvar el armenio occidental, se acabó".

Teniendo en cuenta la fuente, esto fue realmente impactante.

Sin duda algunos tendrán gran placer en observar la ironía de abordar esta cuestión en este idioma y no en armenio. Pero eso es parte de nuestro problema, a abrumadora presencia de idiomas de los países receptores de la diáspora. Esto llevó al desuso de nuestra propia lengua. Teniendo en cuenta que el segmento de nuestra nación que fue objeto de genocidio ahora vive en la dispersión, eran / son los que hablan el armenio occidental, que es la mitad de nuestra lengua y toda una riqueza natural que va a sucumbir.Un toque de ironía positiva, un rayo de esperanza puede venir de aquellos armenios que han vivido escondidos entre las fronteras de Turquía desde hace tres generaciones. Si el proceso de redescubrir la plenitud de sus raíces armenias realmente se afianza, se convertirán, a largo plazo, en los nuevos altavoces del armenio occidental.
De todos modos, soy demasiado testarudo para aceptar esta derrota inminente y les invito a unírseme en mantenerlo, incluso partiendo de lo que tenemos. Vamos a hablar, escribir, y lo que es más importante, enseñar a todos nuestros compatriotas en armenio occidental.