Hacia el reconocimiento del Justo Turco. Por Klaus Lange Hazarian

En reiteradas oportunidades se ha escuchado que los armenios no destacan a los turcos que se arriesgaron por los armenios durante el geno...

En reiteradas oportunidades se ha escuchado que los armenios no destacan a los turcos que se arriesgaron por los armenios durante el genocidio. Esta semana, el Museo del Genocidio de Armenia anunció que hará una muestra retrospectiva para aquellos "justos turcos" y en algunos foros ya se discuten con qué criterio se los eligió o si es una acción honorable pero moralmente equivocada.

Para sumar al debate, habría que leer una columna de opinión escrita en 2022 por Edmond Azadian, que brinda interesantes cuestionamientos, pero que al final desluce al recurrir a la vieja artimaña de los intelectuales armenios de reforzar sus ideas citando a generales o eclesiásticos de uno u otro partido.

Pero el proceso empezó. Armenia, con la muestra que está preparando realizar en Ereván, ha tomado una decisión capital que trasciende sus fronteras y nos atañe como Diáspora.

Algunos piensan que es éticamente necesario homenajear a los descendientes  de los que fueron justos en aquellos días. Otros, temen que se convertirá en un mero hecho político y se reconocerá a los eruditos y periodistas turcos modernos que desde hace unas décadas demandan a su país que reconozca el genocidio. 

Yo pienso que así como condenamos a ciertos países por su participación directa o indirecta en el genocidio, también deberíamos reconocer a aquellos naciones que albergaron a los sobrevivientes y les dieron refugio y una nueva oportunidad de vida.

Klaus Lange Hazarian