Certámenes literarios para la reconciliación entre turcos y armenios

En línea con sus antecedentes históricos fundacionales con más de medio siglo de antigüedad, la Fundación Wallenberg conduce en la actualid...

En línea con sus antecedentes históricos fundacionales con más de medio siglo de antigüedad, la Fundación Wallenberg conduce en la actualidad iniciativas que procuran un acercamiento entre los pueblos de Armenia y de Turquía.

Así es como la organización, presidida por Eduardo Eurnekian y fundada por Baruj Tenembaum, ha puesto en marcha la idea de celebrar certámenes literarios para que los mismos sean organizados en Turquía y en Armenia, tanto en escuelas secundarias como en universidades.
Algunos de los títulos ya propuestos a decenas de casas de estudios en ambos países son: «Armenia, Turquía y la construcción de puentes de entendimiento y respeto mutuo» o «Abriendo nuevos caminos. El rol de las juventudes turcas y armenias en el establecimiento de relaciones normales entre ambos países».
Entre los primeros interesados en la iniciativa se destaca la prestigiosa Universidad Sabanci de Estambul, la cual a través de su rector, el profesor Nihat Berker, ha manifestado su deseo de cooperar y participar en el singular emprendimiento intelectual.
«Celebramos que sea desde Estambul de donde llega una de las primeras adhesiones a los certámenes literarios; precisamente desde la milenaria ciudad que fuera el escenario en el cual Angelo Giuseppe Roncalli, como Delegado Apostólico del Vaticano, patrocinara una masiva operación de salvataje de miles de judíos condenados a muerte por el nazismo», sostuvo Tenembaum.
Cabe señalar que en 1958 Roncalli fue consagrado Papa con el nombre de Juan XXIII y su postulación a Yad Vashem para ser declarado «Justo entre las Naciones» es otro emprendimiento de la Fundación Wallenberg.
Al mismo tiempo, importantes factores comunitarios adhieren a la idea de la Fundación Wallenberg de rendir tributos a los Salvadores Armenios del Holocausto, así como a turcos que hayan asistido a armenios víctimas del Genocidio de 1915.
«El estudio de la historia turca y armenia exige educar a los niños para que las relaciones entre ambos pueblos transiten un camino de entendimiento, mutuo respeto y reconciliación. Estamos comprometidos con la ejecución de esta iniciativa así como con la difusión masiva de los resultados», señalaron Tenembaum y Eurnekian.


Vía Fundación Wallenberg